Tea connection

Me gusta contar que antes de ser novios eramos mejores amigos, que eras la mejor parte de mi. Quién pudiera reemplazarte, mi amor. no fuimos más que intentos de lo que nunca pudo ser. Y así me di cuenta que no pudo pasarme algo mejor. No vine a derrochar tristezas de cómo no pudimos, sino a contar lo que sí fuimos, de con cuánta locura nos amábamos, por esa latente inocencia que siempre tuvimos.
Siempre nos volvemos a ver, y siempre estas para mi, qué miedo que siempre sea así, que miedo que nunca encontremos el final.
Hace exactamente una semana volví a verte. Nos reímos, como no lo hacíamos hace tanto, tirandome frases de cuánto nos amábamos, y recordando viejas cosas, y sabes que sí, yo te amé, te ame como nunca voy a poder amar a nadie. Todavía me acuerdo el día que me pediste de ser novios, un tanto tímido y con miedo, esperando un colectivo juntos, una noche fría, que pedía que me hables bajito, "Yesi... Querés ser mi novia?" No hubo flores, ni chocolates, ni una cena, sólo vos y yo en una esquina esperando un colectivo, y cómo decirte que no?, cómo no enamorarme de tu simpleza, de tus abrazos y tu loca forma de mirarme con amor, porque todo lo que fuimos fue más allá. De cómo no sabias cocinar, y también es algo que me encanta contar, porque me sacaste sonrisas más sinceras, porque fue donde más feliz fui.
Qué ganas de ir a buscarte, otra vez, y pedirte que me abraces, porque no puedo con algo que no soy, sin tu apoyo no puedo. Quiero a mi mejor amigo otra vez, del loco que hacía que nos tiremos en el pasto y nos riéramos de todo, cuando nos entendíamos sólo con una mirada. El mismo con el que después de discutir, nos despertábamos a abrazos, olvidandándonos de porqué peleabamos hasta qué día era. Siempre me sentí la mina más hermosa, pero era sólo porque estaba con vos.

Si eras el sol del meJor mediodía.